BAM fue reconocida como la ganadora del Premio a la Ecoeficiencia Empresarial 2011, en la categoría Recursos naturales renovables. Se trata de una distinción otorgada por el Ministerio del Ambiente MINAM y la Universidad Científica del Sur a las empresas que impulsan con éxito el desarrollo sostenible en el Perú.
Este premio distingue el eficiente aprovechamiento y manejo sostenible de los recursos naturales de nuestro programa Reforestación en Campo Verde, ubicado en la región Ucayali, a 35 kilómetros de la ciudad de Pucallpa. Con este programa, Bosques Amazónicos BAM ha logrado recuperar hasta la fecha 730 hectáreas de suelos degradados; al abonarlos y sembrarlos con más de 620 mil árboles nativos de gran valor, como el shihuahuaco o cumarú y la marupa.
El Premio a la Ecoeficiencia Empresarial 2011 no solo confirma el liderazgo de BAM en proyectos de reforestación en la Amazonía peruana, sino también, reafirma la importancia de la inversión privada para el crecimiento del sector forestal y el desarrollo sostenible de los bosques en America Latina y el mundo.
Más sobre el programa de reforestación en Campo Verde de BAM
La agricultura migratoria, la extracción forestal ilegal y la sobrexplotación de los bosques naturales ha generado la deforestación y degradación de extensas áreas en la Amazonía peruana. Sobre estas áreas de escaso valor, Bosques Amazónicos BAM pone en marcha dos modelos de reforestación eficientes, y que han sido validados y reconocidos internacionalmente: la reforestación para la recuperación de suelos degradados y la restauración de bosques secundarios depredados.
El proceso inicia con un análisis biofísico del suelo para identificar el tipo de especies nativas ideales para la zona, continúa con la producción de plantas en el vivero, y concluye con la instalación de los futuros árboles en el área seleccionada, la que ha sido previamente fertilizada y enriquecida con la siembra de guaba o pacae (Inga edulis Mart.), un árbol frutal nativo capaz de fijar nitrógeno en los suelos y enriquecerlos con materia orgánica, además de suprimir el crecimiento de pastos competidores, brindando sombra y protección para optimizar el desarrollo de las especies forestales.
“Con este esquema, BAM ha logrado recuperar los bosques y la biodiversidad de las áreas degradadas, conectando bosques fragmentados y recreando hábitats para la fauna silvestre. Además, el proyecto ha ayudado a desarrollar la capacidad de las comunidades locales para el manejo forestal sostenible, promoviendo técnicas de tala selectiva de bajo impacto, así como conocimientos para el manejo de viveros y plantaciones, lo que no sólo fomenta un desarrollo económico más equitativo, sino también desincentiva las prácticas agrícolas improductivas tradicionales”. Explica Jorge Cantuarias, fundador de BAM.