La Amazonía, con su vasta biodiversidad y vegetación, es uno de los ecosistemas más preciados de nuestro planeta. Sin embargo, también ha sido víctima de la deforestación y la explotación insostenible a lo largo de los años. En medio de este desafío, se encuentra Bosques Amazónicos (BAM), una empresa que no solo se esfuerza por recuperar la biodiversidad y ecosistemas de la selva peruana, sino que también trabaja con mucho empeño y dedicación para construir un futuro sostenible en la región.
A medida que profundizamos en este viaje, junto al Gerente General de BAM, Jorge Cantuarias, descubriremos las estrategias innovadoras que han guiado el desarrollo de BAM y cómo ha superado obstáculos para lograr el crecimiento que tiene hoy en día la empresa. Desde el financiamiento hasta la tecnología y la participación comunitaria, desentrañaremos los pilares en los que se basa la estrategia de BAM. Además, nos adentraremos en el enfoque de responsabilidad social corporativa y desarrollo comunitario, destacando su compromiso con las personas y los ecosistemas que rodean sus proyectos en la Amazonía.
¿Cuéntanos cómo nace BAM? ¿Cuál es su propósito y su visión?
Tuve la oportunidad de estar en la selva central, específicamente en la ciudad de Pucallpa en los años 90, por diferentes actividades que realizaba en ese momento, y vi una realidad que desafortunadamente continúa hasta el día de hoy. Una realidad donde ves áreas enormes de pasturas o áreas completamente deforestadas que han perdido el valor económico. En esa época, veníamos de una etapa muy complicada políticamente en el país y esto era aún más grave. Entonces, ante esta situación, surge la idea de tratar de recuperar el valor económico y productivo de esas áreas. Y lo que hicimos es un pequeño piloto, en ese momento, que fue financiado por La Cooperación Internacional, El Fondo de las Américas, específicamente, el Gobierno Regional del Perú, que desde ese entonces entendió que no podía ser posible que tuviéramos una realidad de ese tipo. Es decir, áreas enormes que no tenían ninguna utilidad productiva y que habían perdido completamente el valor económico.
¿Cómo ha sido el desarrollo de estos proyectos a lo largo de los años? Siendo ustedes pioneros en un mercado poco o nada desarrollado: ¿Cuáles son las principales barreras que ha superado BAM a lo largo de este tiempo para llegar al crecimiento que tiene hoy en día?
La principal barrera que se evidenció muy rápidamente fue la financiera. Nosotros comenzamos este piloto de reforestación con especies nativas en Campo Verde y tuvimos excelentes resultados rápidamente, entonces cuando quisimos replicar y obviamente incrementar las áreas que habíamos iniciado a reforestar, nos dimos con la triste realidad de que no había financiamiento en el Perú. Evidentemente no había un expertise de los bancos, la Cooperación Internacional normalmente financia proyectos o iniciativas tempranas pero no de escala como las actividades que nosotros estábamos buscando, y esa fue la primera barrera. Todavía no existía el mercado de carbono que finalmente fue el motor que nos permitió iniciar el crecimiento de BAM y llevarnos hasta donde estamos hoy día.
¿Qué estrategias o enfoques innovadores ha venido utilizando BAM para poder asegurar la sostenibilidad en el largo plazo de sus proyectos?
Nosotros estamos convencidos de que cualquier tipo de desarrollo tiene que involucrar a los vecinos, a la comunidad, a la gente que está alrededor del proyecto, y eso lo hemos venido haciendo en todos nuestros proyectos. Trabajamos con gente muy cercana en el tema de Campo Verde: los caseríos, los vecinos. Estamos permanentemente realizando proyectos y transfiriendo tecnología con ellos para que vean que realmente el desarrollo de una empresa debe irradiar bienestar a las comunidades que están alrededor de los proyectos. Y lo mismo en el proyecto que tenemos en Madre de Dios: REDD+ Castañeros, que es un proyecto muy grande donde hoy día protegemos cerca de medio millón de hectáreas. Es un proyecto emblemático para nosotros y yo diría que para el país también, porque iniciamos en una etapa muy temprana del desarrollo del mercado de carbono, y sin embargo, hemos podido mantenernos unidos durante 15 años. Hoy día con un mercado más desarrollado estamos viendo los resultados. No solamente de haber protegido un área tan importante por su valiosa biodiversidad, sino también porque estamos viendo los resultados en cuanto al mejoramiento y la calidad de vida de nuestros socios del proyecto.
Ahora que mencionas el tema de la tecnología: ¿Cómo es que lo han implementado, por ejemplo, en el Programa de Ciencia BAM o en el Programa de Mejoramiento Genético Forestal?
El gran valor que tiene, en este caso, el proyecto de reforestación en Campo Verde, es que tenemos material genético de cerca de 20 años que ha venido de diferentes procedencias de la Amazonía peruana y hoy día hemos iniciado un Programa de Mejoramiento Genético Forestal con asesoramiento local, pero también internacional (con el Instituo Tecnológico de Costa Rica – TEC). Estamos sacando los primeros clones de especies, como shihuahuaco, marupa, caoba, de árboles que han sido seleccionados de millones de árboles que sembramos. Entonces, esto es un cambio tecnológico muy importante que esperamos revolucione el sector forestal, básicamente el de reforestación con especies nativas.
Pasando un poco más al tema de comunidad: ¿Podrías compartirnos, algunos ejemplos más concretos de responsabilidad social corporativa y de desarrollo comunitario llevados a cabo por BAM?
En Madre de Dios estamos buscando transferir la tecnología que hemos desarrollado en la reforestación y gracias a nuestros años de experiencia. Actualmente, estamos desarrollando un proyecto de enriquecimiento de bosques con castaña (proyecto REDD+ Castañeros), que también es muy interesante, y todo esto tiende a mejorar la calidad, ese es el propósito de vida de nuestros socios. Por ejemplo, algo que estamos haciendo muy novedoso, es un Programa de Becas para los hijos y para los nietos de nuestros socios (castañeros), que debemos estar lanzando pronto y estamos muy entusiasmados, porque eso también va a permitir desarrollar capacidades humanas que son finalmente lo que genera el gran cambio.
¿Cuáles son ahora las metas, perspectivas y visión a futuro de BAM, en cuanto a la expansión de sus proyectos y a la contribución de la conservación en la región amazónica?
Tenemos que entender que, desde la perspectiva de BAM, es imposible lograr las metas que se ha propuesto el mundo en términos de combatir los gases de efecto invernadero, si no se involucra el sector forestal. Este sector representa alrededor del 20% de las emisiones (de gases de efecto invernadero), eso lo sabemos, está comprobado. Los bosques se pierden y normalmente nos preguntamos: ¿Cómo se pierden? Se queman. Y esta es una emisión directa de CO2 al medio ambiente. Entonces, todos los esfuerzos que haga el mundo para lograr las metas de reducción de emisiones tienen que considerar al sector forestal como parte de la estrategia.
En ese mismo sentido, aún cuando todavía los bonos que generan el sector forestal son comercializados en el mercado voluntario de carbono, con el tiempo estamos convencidos que economías importantes y la mejora, evidentemente, de las capacidades internas; como involucrar al gobierno, al Ministerio del Ambiente, a toda la parte técnica que tenemos muy desarrollada en el Perú, se puede lograr poder comercializar bonos del sector forestal del Perú. Sobre todo, porque tenemos ya una ventaja con relación a otras realidades, y eso nos va a permitir poder generar ingresos para mantener estos proyectos de conservación, y desarrollar los pueblos y las comunidades que viven de los bosques, que finalmente son los grandes defensores de nuestros bosques. Eso es por el lado del carbono.
Por el lado de sostenibilidad, tenemos que ser conscientes de que no podemos perder esta biodiversidad extraordinaria que tienen los bosques amazónicos y que es una responsabilidad de la sociedad y del mundo en mantenerlos, y no hay manera de mantenerlos, nuevamente reitero, si no logramos a su vez desarrollar a los pueblos que son los grandes guardianes de la Amazonía peruana.
¿Nos podrías adelantar algo para el 2024?
Estamos muy entusiasmados por el incremento de nuestras áreas en los proyectos que ya tenemos, y también estamos comenzando un proyecto con comunidades nativas en Loreto. Es la primera vez que una empresa privada, como nosotros, se involucra con comunidades nativas. En este momento, mientras conversamos, un equipo de BAM está haciendo toda la parte de compartir con los líderes de la comunidad, qué cosa es un proyecto de conservación REDD+, cómo se manejan, qué es el mercado de créditos de carbono, entre otros aspectos. La primera prioridad para nosotros es que se entienda perfectamente de qué se trata y que estos son compromisos de largo plazo.
Un ejemplo clarísimo es lo que ha sucedido con el proyecto REDD+ Castañeros: 15 años después nos mantenemos unidos, más fuerte que nunca. Hemos incrementado, casi duplicado el área que conservamos en Madre de Dios, y esto no es algo tan difícil. Se trata de comunicar correctamente, de poner las cartas sobre la mesa desde el primer día, y que los acuerdos se respeten. Y eso es lo mismo que pensamos hacer con los siguientes proyectos. Así que pronto estaremos en el primer proyecto de conservación REDD+ con comunidades nativas.
BAM
La historia de BAM es un testimonio inspirador de cómo una idea, nacida en medio de desafíos y adversidades, puede florecer en un movimiento que abraza la sostenibilidad y el cambio positivo. Desde sus inicios hasta sus logros actuales, BAM ha demostrado que la restauración de la selva y la construcción de un futuro sostenible son metas alcanzables. Su enfoque en la comunidad, la tecnología y la responsabilidad social corporativa nos recuerda que la conservación no se trata solo de proteger el medio ambiente, sino también de empoderar a las personas que dependen de él. Con la mirada puesta en el futuro, BAM continuará forjando un camino que busca no solo preservar la Amazonía, sino también enriquecerla y asegurar su prosperidad duradera.
Más sobre BAM
El proyecto de conservación REDD+ Castañeros desarrollado por BAM trabaja de la mano con más de 700 familias castañeras socias en Madre de Dios para proteger más de 500,000 hectáreas de bosques y su extraordinaria biodiversidad.
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BAM, inversión privada para un mundo sostenible.
Sección entrevistas:
Dale un vistazo a la entrevista de Jorge Cantuarias con Aldo Carlos, conductor de «PRO con la Naturaleza» aquí.
Dale un vistazo a la entrevista de Walter Wust, Director de BAM y Líder del Programa de Ciencia BAM aquí.
